Se trata de una vitamina que aporta muchos beneficios al cuerpo humano. Su consumo ayuda a prevenir y a curar, en algunos casos, ciertas enfermedades; así como también ayuda a absorber y mantener por más tiempo la vitamina A y E en el organismo.
Como es bien sabido, la vitamina C proporciona nutrientes necesarios para el correcto funcionamiento del organismo, por lo que se ha demostrado que su consumo es de vital importancia en los seres humanos.
Los beneficios del ácido ascórbico son necesarios para el crecimiento y reparación de tejidos así como lo es para el corazón, la piel, el sistema inmunológico, entre otros.
Se recomienda ingerir esta vitamina directamente de las frutas y vegetales que la contengan, en proporciones adecuadas, ya que su consumo a través de suplementos, no las sintetiza el organismo.
Hablar de una dosis diaria de consumo de ácido ascórbico para una persona, sería imposible de definir sin un estudio previo, es decir, la dosis por persona varía dependiendo de su tamaño, peso, edad, entre otras cosas.
Sin embargo, existen dosis mínimas recomendadas, por ejemplo, en el caso de un adulto promedio, la ingesta recomendada es entre 70 y 80 gramos. Pero todo va a depender de sus características, por lo que siempre es recomendable consultar con un médico especialista.

Alimentos ricos en vitamina C
Guayaba
Esta fruta, conocida frecuentemente en la zona tropical como guayaba, cuenta con diversas propiedades que son de beneficio para la salud. Entre ellas podemos encontrar que es rica en pectina, antioxidantes, fibra, vitamina A y potasio.
Dependiendo del tipo de esta fruta (existe variedad en ella) varía la cantidad de vitamina C que puede aportar.
Chiles picantes
Estos chiles son muy ricos en vitamina C, además de ello, contienen también vitamina B1, B2 y B6 y minerales tales como el hierro, potasio, yodo, sodio, azufre, magnesio, entre otros.
El contenido de vitamina C puede variar de acuerdo a su color, siendo en mayores cantidades los chiles verdes más que los rojos.
Tomillo y perejil
Todas las hierbas, tanto secas como frescas, aportan infinidad de beneficios y vitaminas. El tomillo generalmente se utiliza para problemas estomacales mientras que el perejil es un potente diurético, ayudando a limpiar los riñones.
Su contenido en vitamina C es más o menos similar, teniendo una mínima variación uno de otro.
Verduras con hojas verdes
Las verduras que poseen este color verde en sus hojas, son ricas en minerales y vitaminas ya que, la clorofila, quien es la causante de generar el color verde, contiene infinidad de propiedades beneficiosas para el organismo.
Podemos encontrar en porción de vitamina C, entre 70 y 120 gr de vitamina por cada 100 gramos de verduras de este tipo.
Naranja y mandarina
Son frutas ricas en vitaminas, minerales y oligoelementos. Se ha demostrado que su consumo constante puede reducir considerablemente el riesgo de padecer enfermedades tales como cáncer o del corazón.
La cantidad de vitamina C que puede contener cualquiera de estas dos frutas rondan entre los 50 gramos por cada 100 gramos que se consuman.
Brócoli
Se considera que el brócoli cuenta con diversas propiedades curativas y preventivas. Puede disminuir considerablemente el riesgo de padecer enfermedades como la diabetes, el corazón o algunos tipos de cáncer. Cuenta con fitonutrientes, vitaminas y minerales.
Su alto contenido de ácido ascórbico facilita una buena salud a quien lo consume de forma continua. Su aporte de esta vitamina oscila entre 70 y 90 gramos por cada 100 gramos que se consuma.